Las ondas de choque son ondas acústicas de alta potencia y baja frecuencia que tienen efectos mecánicos y biológicos para un efecto terapéutico. Este tipo de técnicas se utilizan principalmente en tratamientos de patologías que precisan regeneración de los tejidos.

Se trata de una técnica no invasiva que se puede realizar de forma aislada en 15 minutos de tratamiento.

Las propiedades terapéuticas de las ondas de choque se basan en  la nueva creación de vasos sanguíneos, producción de colágeno, eliminación de los puntos gatillo, eliminación de calcificaciones y tratamiento de inflamaciones crónicas. 

Algunas de las patologías recurrentes que suelen tener indicaciones de tratamiento con estos equipos son las calcificaciones en hombro y epicóndilos, espolones calcáneos, fascitis plantares, tendinopatías superficiales y similares.